El salón es una de las zonas de la casa donde pasamos más tiempo y el lugar de relax preferido junto al dormitorio. Si no contamos con uno muy amplio debemos optimizar bien el espacio para ganar metros, pero también aplicar algunas técnicas para que nos dé más sensación de amplitud.

En primer lugar es importante que el color de las paredes sea lo más claro posible para que parezca más grande, y algo similar con el color del suelo, ya sea de baldosa o madera. Si no es el caso y no estás dispuesto a cambiar el suelo, tampoco es mala idea colocar alfombras de color claro que hagan un buen contraste.

El sofá es uno de los elementos que más ocupa, por eso debemos colocarlo pegado a la pared y debemos prescindir de un chaise longue. Enfrente podemos poner la televisión, pero para ganar espacio lo mejor es colgarla en la pared y evitar así un mueble de soporte innecesario. En otros caso, dependiendo de la anchura y forma del salón, podemos colocar el sofá como elemento divisorio para crear dos ambientes diferentes.

Como no podemos abusar de muebles, podemos utilizar una lámpara más ostentosa (si la altura del techo lo permite) o cuadros grandes verticalmente. Del mismo modo debemos colocar las cortinas lo más altas posible para que de una sensación de mayor amplitud.