Si tienes duda sa la hora de elegir el tipo de fregadero y la grifería que más te convienen, auí te explicamos todas las ventajas e inconvenientes de cada modelo.

Cuando se trata de elegir fregadero lo primero que se escoge es el modelo que mejor le vaya la mobiliario y al estilo general de cocina.

Así, por ejemplo, los materiales naturales, marmol y granito, quedan perfectos en las cocinas más rústicas también la porcelana les confiere un aire delicado y nostálgico. Pero se imponen por su funcionalidad y vesatilidad los fregaderos de acero inoxidable y de materiales sintéticos. El metal combina con cualquier encimera, y si esta es también de acero, se puede encargar de forma que el fregadero y la encimera sea una sola pieza, sin juntas, como en las cocinas profesionales.

El inconveniente del acero es que se raya; los grabados disimulan mejor los posibles arañazos.

Frente a la porosidad de materias primas naturales como el marmol sensible a las manchas de ácidos, como el vinagre o el limon, están los fregaderos hechos también a base de partículas minerales de cuarzo y granito, trituradas y mezcladas con resinas, lo que logra que sean compactos, impermeables y en una amplisima gama de colores.

Los fregaderos blancos y de acero inoxidable se integran muy bien tanto en cocinas de estilo actual como de aire rústico.

El color es un ingrediente básico a la hora de decorar una casa. Por eso, aquí te mostramos cómo utilizarlo proponiéndote una serie de combinaciones frescas y armoniosas. Aprende a manejar diferentes tonos y personaliza tus ambientes.

El efecto global de la utilización de los neutros o naturales en decoración es una sensación de espacio, tranquilidad y aromnía, además de tener la certeza de que no pasarán de moda rápidamente. La luz y la textura son dos elementos muy importantes: los colores pálidos reflejan la luz natural d elas paredes y la devuelven en la habitación, las texturas quedan resaltadas ante la ausencia de color. En la atualidad, este tipo de decoración es sinónimo de ambiente natural, y con un toque de color añadido, aportará viveza y enfoque.

• Paredes: Una forma sutil de agrandar visualmente una habitación es vistiendo las paredes con un papel pintado de rayas verticales. El efeto es completo si los colores elegidos para las mismas son suaves y egamados.
• Suelos: Las alfombras y moquetas de fibras naturales, como el coco o el cáñamo, están de moda y proporcionan calidez. Decídete por los tonos fuertes, es una forma de conseguir profundidad en la estancia. Sin son lisas crearán sensación de espacio, y si sus tonos son suaves se fundirán con el resto de los muebles, permitiendo en los complementos cierto atrevimiento.
• Tejidos: Importantísimo el tipo de tela del que estén hechos los pequeños detalles, como las mantitas para poner sobre los sofás. Deben ser suaves y cálidas, para que su contacto sea agradable. En cuanto a los tonos, los tostados, marrones o naturales crean ambientes equilibrados y confortables, coordinando con muebles blancos.
• Accesorios: Tres son los accesorios básicos en la decoración de un salón: los cojines que, pese a su pequeño tamaño, unifican un esquema decorativo mediante unas pinceladas de dibujo o color. Unas rayas finas o en tonos fuertes acentúan los colores secundarios de una habitación. Las lámparas de mimbre o decapadas y la pantalla de cuadros, se integran perfectamente en ambientes actuales. Por último, los objetos decorativos agurpados por colores, como el vere pistacho, realzan el esquema cromático, en este caso el natural.

La compra de un sofá supone una importante inversión. Además de un diseño adecuado, debes apostar por una estructura fuerte, un relleno cómodo y una tapicería a prueba de bomba, todo esto teniendo en cuenta su tamaño.

A continuación se listan los detalles más importantes:

• El armazón: Debe ser sinónimo de resistencia. Procura que la estructura del sofá sea sólida; durará más años, unos 12 por término medio.
• Butaca: Persigue el objetivo del reposo completo. Por eso, los diseños anatómicos, los respaldos reclinables, los reposacabezas y reposapiés son indispensables en ellas.
• Complementos: La falta de espacio ha favorecido ideas nuevas: la incorporación de dos a cuatro ruedas a sofás y butacas permite una movilidad absoluta.
• Medidas: para que un sofá sea cómodo, su profundidad debe situarse entorno a los 60 cm; así no forzaremos la zona lumbar. El respaldo tiene que tener entre 80 y 90 cm de alto. Cuando no cumplen este cánon, resultan perjudiciales para el cuello y algo anti estéticos. Su anchura debe de estar entre 1,65 m y 1,75 m para los sofás de dos plazas y de 2m para los de tres plazas.
• Rellenos: El material que compone el relleno de aseintos y respaldos es decisivo. Evita los cojines muy blandos. El rellon puede ser de pluma, de pluma y espuma o de espuma poliester. Las plumas de oca son el relleno más caro, pero dan buen resultado por que se adaptan bien al cuerpo y no se deforman si tienes la precaución de ahuecarlas y sacudirlas cada 15 días.

Estos son los puntos fuertes a tener en cuenta a la hora de comprar un sofá y sobre todo disfrutar de su uso durante el mayor tiempo posible!!

Lo quenecesita es vida y color. Vamos a dárselo con pequeños cambios como pintar muebles y macetas, renovar las telas, añadir algún detalle y muy importante, llenarla de geranios, hortensias y begonias.

Vamos allá, verás como queda como nueva y te sientes muy agusto con estos consejos:

1.- Pon flores junto al brezo

Las vallas de brezo o caña nos ofrecen intimidad pero son un poco tristes. Prueba a colgar en esa misma pared una hilera de jardineras con geranios blancos, rojos y rosados. Verás como ese rincón queda mucho mas alegre.

2.- Coloca detalles en la mesa.

Una mesa desnuda no transmite calidez a la terraza. Las tazas del desayuno o los platos del almuerzo la llenan de vida durante un rato; un farol de hierro o un ramo de fucsias le dará calor todo el día.

3.- Decora las macetas.

El secrto está en pinttar sólo algunas macetas, las más grandes o un grupo de tiestos pequeños que ocupen un lugar destacado. Se trata de animar el tono natural del barro y por eso hay que elegir colores intensos y contrastados, como el azul ultramar y el verde manzana del siguiente paso a paso. Eso sí, es importante no complicar el dibujo: rayas, lunares o estrellas son los motivos que mejor resultan.

4.- Dos sillas distintas.

A las sillas que van a juego con la mesa puedes sumarle dos mas completamente distintas. Con ello ganaras sitio para más comensales y un toque desenfadado en la mesa. Elige algo informal, práctico y con mucho color, como las sillas de director, además de plegables son baratas y sus lonetas multicolor se pueden lavar.

5.- Agrupa las plantas.

En lugar de tener una maceta aquí y una más allá, intenta agruparlas y crear composiciones; lucirán mucho más. Así lo hemos hecho con estas hortensias, alineadas sobre el muro que separa una terraza de otra.

Nubes, dibujos, grecas, colores difuminados…. la pintura decorativa nos permite echar mano de nuestra imaginación y cambiar por completo el aspecto de cualquier habitación. Las técnicas que reflejamos en este artículo suelen usarse sobre paredes pintadas con esmalte satinado cmo color base o con pintura plástica tambien satinada. Su imagen final dependerá de la tecnica elegida.

Trapeado

Esta técnica es una de las más sencillas. Sobre el color base de la pared, ya seco, se extiende una segunda capa de veladura, consistente en una combinación de pigmentos naturales de color y barniz. El color final de la veladura debe ser más intenso que el fondo de la pared., Así se consigue el efecto a dos colores tan careacterístico de dicha técnica. Antes de que se seuqe esta segunda capa, es preciso pasar por la pared un trapo arrugado, con movimientos muy rápidos. El resultado , mas o menos marcado, dependerá de la trama del tejido elejido; yute, algodón, lino, gamuza…. Los colores más apropiados para el trapeado son todos los terrosos y las diferentes tonalidades de azules.

Falso estucado

Esta técnica es una variación del estuco, que consite en aplicar polvo de mármol coloreado sobre la pared. Debido a que este es un trabajo laborioso y más costoso, las últimas tendencias decorativas se decantan por el falso estuco, en el que sobre una base de pintura blanca, se aplica una mezcla de óleo, aceite de linaza, pigmentos naturales del color que se hayan elegido y un poco de aguarrás. Con una brocha, se extiende la mezcla en sentido diagonal y se difumina con mucho cuidado llevando la brocha de un lado a otro para conseguir que el acabado sea irregular.

Mármol o pintura son los materiales que más se usan para revestir baños y aseos. En este artículo descubrimos sus cualidades y te proponemos buenas ideas para combinarlos.

El marmol

Es un material natural, y en el baño es el rey de los revestimientos. Su gran cualidad es que resiste la humedad como ninguno otro, aunque también es cierto que resulta un poco caro y, al tratarse de una piedra, es frío al tacto y a la vista.

Si vas a revestir el baño con mármol ten en cuenta que las losetas estandar no salen tan caras como las medidas especiales.

Si no quieres renunciar a su funcionalidad, pero te preocupa, que transmita frialdad, elige uno de color terroso, como e travertino romano o el rosa Gerona. Además, a casi todos los mármoles se les puede dar distintos acabados y con algunos se consigue un cálido aspecto rústico. La técnica del abujardado le da al mármol un delicado aspecto envejedico; con el flameado también se consigue una textura rugosa y con el apomazado, una superficie lisa pero sin brillo.

La pintura.

Es cierto que la pintura no puede compararse con la resistencia del mármol o la cerámica; pero no por eso hay que renunciar a ella en el baño. Hay muchas maneras de utilizarla y merece la pena aprovechar sus infinitos colores y acabados.

Lo ideal es que sólo la utilices en las paredes que no estén en contacto directo con el agua. No hay que usarla junto a la bañera o ducha, pero siempre puedes pintar la pared del lavabo o un aseo.

Si el baño tiene ventilación, la pintura durará de tres a cuatro años en buenas condiciones. Después habrá que volver a pintar. Pídele al pintor que primero aplique una capa selladora antihumedad y que utilice pintura plástica o esmalte.

Hoyo en día cabe la posibilidad de pintar sobre los antiguos azulejos sin que se noten las juntas. Ya no es necesario meterse en obras, derribar los azulejos y enyesar la pared. Las nuevas técnicas permiten alisar una pared revestida de azulejos y acabarla con pintura.

La cocina y el comedor son dos piezas que suelen estar separadas por puertas y tabiques, los cuales, además, aíslan a la primera del resto de la casa. ¿Cómo reunir dos estancias de tan distinto carácter y convertirlas en una? Quizás el primer paso en este sentido se diera, hace ya muchos años, y siempre que ambas piezas estuvieran divididas tan sólo por un muro, cuando se creó el pasa platos, abertura que permitía pasar las fuentes con las viandas de una a otra.

Dos son los detalles más importantes a tener en cuenta cuando confeccionamos nuestra cocina comedor:

1.- La integracion

Las dos piezas están totalmente integradas y sus funciones se confunden de tal modo, que no se sabe dónde empiezan las de una y terminan las de la otra. Los utensilios e instrumentos culinarios se disimulan bajo la superficie de trabajo, agrupados en una sola zona d ella estancia para mayor comodidad. En la otra parte, una mesa redonda o rectangular reune a los comensales. Pero ¿por que no adoptar la mesa central que domine toda la pieza, cuando sus dimensiones lo permitan ?

En cualquier caso, es indispensable eliminar totalmente los olores gracias a una campana con un conducto de ancha sección y provista de un buen extractor. Una ventilación eficaz conriguye a un mejor confort.

2.- La decoración.

Cualquier elección es buena. Un estilo funcional, sin grandes fantasías, pero en el que la elección adecuada de los colores desempeña un papel importante: los utensilios se intercalan entre muebles de formica blanca: el tablero del fregadero y el suelo se recubren con baldosines rojos, color que se repetirá en el techo. Una mesa redonda de placa o de plástico, rodeada de sillas o taburetes blancos, completará este conjunto, donde los posters, cerámicas y objetos de cestería pondrán su nota característica.

Pocos complementos dan tan buen resultado como los cojines para sillas, un recurso fácil de realizar y capaz de personalizar. Además hacen más cómodas las sillas y si se eligen las telas adecuadas para confeccionarlas resultan muy atractivas, ya que pueden combinar con el resto de tapicerías.

Una manera de mejorar y aportar gracia a una silla es ponerle una galleta o asiento, como un cojín, que normalmente va atado a las patas traseras. Con eso quedará mucho más decorativa y pondrá una nota de color allí donde se encuentre ; además , resultará mucho más cómoda. A la hora de confeccionar la galleta, la elección de las telas es muy importante. Se recomiendan colores vivos, estampados bonitos y es imprescindible que sean telas fáciles de lavar además de liberas; si también se añaden detalles originales, el resultado será más personal y atractivo.

Por ejemplo, una galleta  normal se puede transformar con solo añadirle  una puntilla que la alegre  o una cinta de pasamanería llamativa; también es más decorativa con un faldón; otra buena idea es guatearla. Pero si además hacemos un respaldo, las sillas tradicionales de enea te cambiarán totalmente su aspecto para mejor.

La cama como es de suponer ocupa el lugar mas importante de nuestro cuarto por lo que la disposición del resto de la estancia dependerá del tamaño o la forma de la cama.

La cama puede colocarse en el centro del panel de la pared, en ángulo de cara a la ventana, orientada en la mejor dirección, su localización dependerá siempre del tamaño de la habitación, pero en cualquier caso esta no debe impedir la libre circulación por el cuarto y debe ser de fácil acceso. Si el espacio es reducido, se impone adoptar la solución de una cama plegable, en forma de diván o una cama empotrada, que se inserte y quede disimulada a lo largo de una pared, en medio de las estanterías de una biblioteca o entre los estantes de un armario.

En el caso de que se disponga de un dormitorio grande cabe la solución de colocar la cama ostentosamente en un primer plano o por el contrario, esconderla por completo, hay dos razones para querer disimularla: si su tamaño la convierte en un elemento desproporcionado en relación con los demás elementos del mobiliario, es preferible hacerla desaparecer o aislarla y todavía con más razón si se cree que es un mueble que no es necesario exponer.

La ubicación de la cama en la habitación es determinante , ya sea ésta pequeña, grande, abierta, cerrada. Siempre dependerá de las costumbres de cada uno, algunos sólo la utilizamos el tiempo necesario para el sueño nocturno, en cambio otros prefieren pasar un poco más de tiempo en ella, ver la televisión , recibir visitas, etc…

Para dar un aire veraniego al dormitorio, os proponemos unas ideas, las cuales podrían ser la solución para proteger la decoloración de la tapicería y los muebles por los rayos del sol, a la vez que da un aire más ligero, fresco y renovado al ambiente de nuestra habitación.

1. Contraste de color: las paredes se cubren con tonos alegres como fucsia o verde, para crear contraste, en la cama se podría añadir un mosquitero para darle un cierto aire colonial, la ropa de cama iría a juego con las cortinas y se añadirán cojines encima de la cama de diferentes formas y colores vivos.
2. Con Dosel: el rojo y el blanco son perfectos para crear una habitación refrescante, combina diferentes tonos en rojo con diversos estampados en rojo y blanco y también algunos lisos, utiliza la gasa de dosel en rojo como cortinas para proporcionar un ambiente cálido a tu cuarto.
3. Colonial: Empapela tus paredes con papel a rayas crudas y verdes y coloca accesorios siguiendo esos tonos como cortinas, cojines, cuadros, lámparas, etc…

Estas son algunas propuestas para que en verano las pongamos a prueba y demos un aire diferente a nuestro dormitorio dejando atrás los tonos de nuestra habitación que estamos cansados de ver día tras día.